Resulta que el señor de la casa sorprende a su hija besuquéandose con el chofer, por lo que, indignado, reclama al trabajador:
* ¡Oyeme, infeliz! ¡¿Acaso te pago para que manosees a mi hija?!
A lo que el irresponsable responde:
* No, señor ¡eso lo hago gratis!
En la oficina de reservaciones la operadora recibe la llamada de una angustiada mujer, que dice:
* ¡Pronto, resérveme un vuelo de inmediato a donde sea, porque mi marido me quiere matar!
* ¿Por "Mexicana"?
* ¡No, por adúltera!
En el restaurante, aquel cliente reclama a la mesera:
* ¡Señotira, este plato está muy mojado
* ¿Mojado?, no, señor, es la sopa.
Un cliente reclama al mesero:
* ¡Mesero, hay una mosca en mi helado!
A lo que el mesero responde:
* ¡Déjela que se congele, señor, vamos a darle una
lección, porque ayer andaba en la sopa de otro de los clientes!
Aquellas dos colegialas platican mientras caminan hacia la escuela:
* Y cuéntame... ¿cómo es tu nuevo novio?
* ¡Ay, manita! Igualito que todos los hombres... Tiene dos
ojos, dos oídos, dos piertas... ¡Y como ochenta manotas!
Aquella señora le explica a su marido:
* Fíjate, Alberto, que la vecina es muy abusiva:
todos los días le cuenta las telenovelas a su mamá por teléfono.
* ¿Y de qué te asombras? ¡Si tú haces lo mismo!
* Bueno, sí, pero yo al menos omito los comerciales.